GRUPO IV
El ejecutante modifica la altura normal de cuatro cuerdas.
233. Sexta en re, quinta en sol, segunda en re, prima en fa sostenido. Con sólo pisar la prima en la primera división se obtiene el acorde de sol sin tercera, es decir, que sirve para el mayor y para el menor; pisando la tercera en la segunda división se consigue sonora dominante. Lo tomé en Catamarca con el nombre de “por falso o igual”.
2061. Sexta en re, tercera en fa sostenido, segunda en la, prima en si. Temple sordo y extraño. Para re mayor. Pisando la prima en la tercera división da el acorde de tónica; pisando la tercera en la primera división y la prima en la segunda, se consigue el de dominante. Es un temple chileno; lo anoté en la isla de Chiloé. Nombre: “baja sencilla”.
2088. Sexta en re, tercera en la, segunda en re, prima en fa sostenido. Para re mayor; todas las cuerdas al aire. Pisando la prima en la primera división y la segunda en la segunda, se obtiene el acorde de dominante. También chileno. Lo apunté en Concepción; la ejecutante lo llamaba “por transporte”. El mismo nombre del temple 2038, que no es igual.
1459. Sexta en re, tercera en fa sostenido, segunda en la, prima en do sostenido. Fácil para la tonalidad de re mayor. Lo oí en San Juan. Además, lo tomé en Valdivia, Chile, donde lo llamaban “por tercera alta”.
A. Quinta en si, cuarta en mi, tercera en sol sostenido, prima en re sostenido. Cómodo para mi mayor. Lo anoté en Córdoba, y el ejecutante lo denominó “medio dos en fas”. La relación de este temple es exactamente igual a la del anterior. Por diferente plan de modificaciones se llega a los mismos intervalos. Sólo he visto dos casos de coincidencia.
1817. Sexta en fa, quinta en do, cuarta en mi, segunda en do. Para fa mayor. Cinco cuerdas al aire dan la dominante; pisando tercera y prima se obtiene la tónica. Lo anoté en Córdoba. Nombre: “medio tres”. Este es el otro caso de coincidencia; dos más adelante veremos el temple letra B, que le corresponde.
1009. Sexta en sol, quinta en do, cuarta en do, segunda en do. Para la tonalidad de do sin dificultades. Lo tomé dos veces en San Luis y una vez en Córdoba. Los dos sanluiseños le llamaban “por medio tres”, y el cordobés, “temple del diablo”.
B. Quinta en si, cuarta en re sostenido, tercera en fa sostenido, prima en re sostenido. Para mi. La dominante con las cuerdas necesarias al aire. Lo anoté en Córdoba, sin nombre. La relación de esta afinación coincide con la del número 1817, que vimos antes.
